El Parador de Villafranca del Bierzo está construido al estilo tradicional gallego, con un techo de pizarra gris y paredes que combinan la piedra y el yeso encalado. Está situado a la entrada de la ciudad de Villalfranca en un bello entorno, con la sierra de Ancares que se eleva más allá de los jardines.
El ambiente se ve realzado por el uso de muebles de madera tradicional castellana, suelos de madera y lámparas de hierro forjado en todo el Parador y un atractivo jardín adorna la entrada del Parador. Las 51 habitaciones ofrecen las mejores vistas de la región nororiental de El Bierzo, del puerto de Piedrahita del Cebreiro y del sur de las montañas de Ancares.
El Parador de Villafranca cuenta con salas multifuncionales (que se abren al patio), una sauna, piscinas interiores y exteriores, así como un aparcamiento más grande, con capacidad para unos 40 vehículos. El Parador es un ejemplo de instalación sostenible, diseñado con conceptos avanzados de consumo de energía y ha establecido un nuevo estándar para el turismo y la gastronomía en la región de El Bierzo.
En el lugar se puede practicar el senderismo, la bicicleta de montaña, el parapente, la pesca, la natación y el piragüismo, y en el hotel se puede descansar en un ambiente elegante, pero a la vez confortable e informal. En este parador hay un aparcamiento en el garaje.